Más bitácoras y el miedo a lo desconocido

Al tiempo que Juan Varela nos adelanta la salida (ya era hora) de las bitácoras en ABC, la Asociación de la Prensa de Madrid (APM) cambia el formato de su web para adaptarse a la blogosfera.

La presencia de las bitácoras en los medios de comunicación es ya inevitable y necesaria, si bien algunos de sus editories aún tienen ciertos problemas para definir qué es una bitácora, confundiéndola con un mero artículo de opinión. Igual pasa con los políticos que se han lanzado a la blogosfera o iincluso a aquellas empresas que las incorporan en su actividad diaria y, especialmente, para la comunicación internta y externa.

Quizá esté ocurriendo como con las páginas web, cuando al principio la cuestión era, básicamente, "estar en la red", sin tener muy claro en qué consistía eso. Aún hoy, lamentablemente, seguimos luchando contra esa idea de que tener colgado cualquier documento, aunque esté a años luz de lo que internet requiere y significa, es suficiente.

A veces, no obstante, el problema está en apostar por las nuevas iniciativas. Hace poco proponía lanzar una bitácora para un servicio de comunicación institucional con un objetivo claro y con beneficios para la imagen, para la comunicación externa e incluso la comunicación interna de esta institución.

El problema es que muchas veces la autorización debe venir de quienes no tienen el conocimiento o,lo que es peor, no tienen la capacidad de delegar en quienes sí lo tienen para poner en marcha nuevas propuestas (a lo que se suma, en este caso, el miedo a que la gente pueda expresar su opinión si es contraria a nuestros intereses).